8 consejos para decorar una casa y que parezca más luminosa

Donde no llega la luz, pueden hacerlo los mejores trucos que te ayudarán a conseguir ese efecto luminoso que tanto te gusta tener en casa y que te hace sentir tan bien. Toma nota de los siguientes tips y verás cómo lo consigues.

febrero 8, 2023

A nadie le gustan las casas oscuras, todo lo contrario, siempre se busca la máxima luminosidad en la mayoría de estancias, porque la luz es salud y condiciona nuestro estado de ánimo. La prueba es que en una vivienda de obra nueva, lo primero que se valora es la orientación, teniendo en cuenta cómo va a incidir el sol en según qué espacios, y a partir de ahí se determina el resto.

Pero no siempre nuestra casa presume de la maravillosa luz que nos gustaría que entrara por las ventanas y es ahí donde queremos compartir contigo una serie de consejos para que logres más luminosidad. Existen diversas maneras de lograrlo con materiales, colores, elementos decorativos, tejidos, etc., la mayoría fácilmente aplicables; otros requieren alguna pequeña obra.

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Los espacios diáfanos, sin tabiques, donde estancias con diferentes usos comparten el mismo ambiente son uno de los recursos más recomendados para ganar luminosidad, teniendo en cuenta que no hay obstáculos visuales y la luz fluye entre ellos. Durante el día estas zonas de la casa abiertas -normalmente suelen ser salón, comedor y cocina- ofrecen un bienestar y una serenidad muy especiales gracias a la luz natural que lo inunda todo.

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Y allá donde quieras mantener esa sensación de espacios comunicados pero con cierta división física para remarcar mejor la distribución de los diferentes usos, puedes optar por paneles divisorios que combinen pladur y, en la parte superior, siempre cristal. Es la manera que lograrás que la luminosidad se comparta igualmente y, como en la imagen, las opciones decorativas que ofrece el cristal pueden resultar muy elegantes. Y no nos olvidemos de las puertas de cristal que aíslan de los ruidos pero, al mismo tiempo, son una vía de luz entre estancias pero, ojo, no aptas para espacios que precisen intimidad.

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¿Por dónde entra la luz? Por las ventanas y aunque tendemos a vestirlas con cortinas, visillos o estores porque decoran mucho más el espacio, hay que pensar que el tejido elegido interfiera lo menos posible en la fuente de luminosidad que representan. Para eso están las telas de lino, hilo y aquellos tejidos de trama ancha, vaporosos, que dejan pasar la luz y cuanto más claro el color, mejor. Sobra decir que si mantenemos abiertas o recogidas las cortinas, la entrada de luz está más que garantizada al 100%.

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En aquellos espacios de la casa con tendencia a tener poca luz, como pueden ser pasillos, distribuidores, recibidores o baños sin ventanas, el truco para ganar luminosidad se llama ‘total white’. Paredes blancas, puertas también blancas para integrarlas mejor y en cuanto al suelo, si no puede ser claro, siempre puedes recurrir a vestirlo con una alfombra clara que te hará el mismo efecto. Y no escatimes en detalles claros o lo más neutros posibles en cuanto a lámparas, cuadros o piezas decorativas, eso sí, siempre añadiendo un toque de de tus tono más subido que rompa la monotonía cromática general.

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Cocinas y baños, pero especialmente estos últimos, son los que acusan más la falta de luz teniendo en cuenta que son la estancia que encabeza la lista de las que puede, en según qué viviendas, no contar con ventana al exterior. Es ahí donde no hay duda que el mejor truco para ‘inventarse’ la luminosidad es elegir colores claros para todos los materiales, desde los revestimientos al mobiliario, los textiles e incluso la grifería. Además, en esta estancia, el tono blanco se agradece porque aporta siempre sensaciones de higiene y frescura.

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Qué decirte de los espejos que no sepas ya. Pues sí, que además de ser un elemento decorativo, también amplían visualmente el espacio gracias a su reflejo y es ahí donde la luminosidad también se desdobla, con lo cual, no te olvides de colocar algún espejo donde creas que necesitas ganar luz. Además, tienes la ventaja que existen infinidad de modelos para elegir el que más se adapte al estilo de tu casa, e incluso lo puedes hacer a medida, o insertarlo en las puertas de los armarios para que puedas verte cuando te vistas. ¡Claro que sí!

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Si eres de las afortunadas que tu casa cuenta con techos altos, ya tienes mucho ganado a la hora de potenciar la luminosidad, sobre todo si haces una apuesta general por los tonos claros. Y existe un efecto visual muy sencillo que también te puede ayudar y es la creación de un arrimadero en la pared. La parte inferior da igual en qué material la decidas e incluso puede ser de color, lo que es importante es que la parte superior sea blanca o muy clara, y el mismo tono para el techo, de forma que visualmente crearás una sensación ascendente que multiplicará por diez la luminosidad.

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Todo al blanco, es la apuesta ganadora sí o sí. Las puertas, pero sobre todo el frente de los armarios, elígelos en blanco y a ser posible lisos, porque la luz se reflejará mucho más y se transmitirá por toda la habitación. Los techos, las paredes también, y el suelo lo más claro posible; ahora existen muchos acabados blanquecinos o envejecidos que ponen esa nota de luminosidad también en el pavimento, que es uno de los materiales que primero hay que elegir cuando se hacen obras en casa.

Hemos tratado de compartir contigo los principales trucos para ganar luminosidad en casa, algunos más sencillos de aplicar que otros, pero todos con la idea de ayudarte sea cual sea tu tipo de vivienda, ubicación, tamaño, distribución o envergadura de la obra, si es que estás pensando en un cambio o reforma.